Cañones de los Ríos Pirón y Viejo "El Valle de la Luz" (Segovia)

Ruta Lineal: Peñarrubias de Pirón, Río Pirón, Molino de Covatillas, Río Viejo, Corral de Máximo, Peñarrubias.

DISTANCIA, COTAS DE ALTITUD, DESNIVEL ACUMULADO Y SEÑALIZACIÓN

Longitud: 11km.

Cota de salida: 896m. (Peñarrubias de Pirón)

Cota máxima: 1000m. (Corral de Máximo)

Altitud acumulada: 104m.

Tipo de recorrido: Camino,Sendero y sendas. Marcas indicadoras y paneles informativos "Sendas del Río Pirón".

Acceso: Desde Segovia capital, por la 601 a Valladolid, tomar la C-603, pasar por el cruce de Cantimpalos y a unos 2 km a la derecha (Km 20,6) seguir la pequeña carretera local SG-V-2224 que finaliza en Peñarrubias de Pirón.

 

DESCRIPCIÓN:

Comenzamos a caminar desde el Hotel Casa Rural "Del verde al Amarillo". Nada más salir de el se nos presenta una bifurcación, cogeremos el camino de nuestra derecha, por el que nos introducimos en el pueblo de Peñarrubias de Pirón.

 

Casa Rural "Del verde al amarillo". Peñarrubias de Pirón. Segovia

 Peñarrubias de Pirón. Segovia

Pasamos unas casa rurales de madera y acto seguido, cogemos la calle que gira a nuestra derecha, por ella saldremos del pueblo, bordeando la finca de labor que está detrás de la casa rural que ha sido nuestro inicio de ruta.

Casa Rural "Del verde al amarillo". Peñarrubias de Pirón. Segovia

Enseguida (En unos 100m) nos serán visibles los primeros carteles indicadores que nos guiaran en la ruta. Se nos presenta una nueva bifurcación,  nosotros seguiremos por la opción de nuestra derecha diriguiéndonos en un principio a El Molino de Covatillas.

290m más adelante, encontraremos una nueva bifurcación, en esta ocasión cogeremos la de nuestra izquierda.

En unos 230m alcanzaremos un nuevo camino, el cual cogeremos hacia nuestra derecha y en unos 40m abandonamos por nuestra izquierda, cogiendo una senda que nos baja, cubiertos por las copas de los árboles (como un túnel vegetal) en unos 300m hasta el Río Pirón y las ruinas del Molino de Covatillas.

Río Pirón. Segovia

Ruinas molino de Covatillas. Río Pirón. Segovia

Alcanzado el río, avanzaremos por su margen disfrutando de la profusa vegetación y el ruido de sus aguas, en el otro margen nos serán visibles las ruinas del Molino  de Covatillas (Siglo XIX) y nos llamara la atención el ruido del agua al saltar de la pequeña represa.

Río Pirón. Segovia

Continuamos avanzando en paralelo al río, disfrutando del bosque de ribera, con sus sabinas, encinas, avellanos, quejigos, chopos y fresnos de troncos huecos.

Río Pirón. Segovia

En unos 550m desde las ruinas del molino, alcanzaremos el Puente de Covatillas  del Siglo XVI (Parte del Camino Real de Turegano a Segovia). Dejaremos momentáneamente el puente a nuestra izquierda (A el volveremos más tarde) y continuaremos avanzando por el sendero en dirección a la Fuente de Las Covatillas, la cual alcanzaremos en unos 200m.

Puente de Covatillas. Río Pirón. Segovia

Fuente de Covatillas. Cañón del Río Pirón. Segovia

Nos llamara la atención el escudo de una familia noble (Relacionada con los Contreras) esculpido en el dintel de la compuerta que regula el nivel de la fuente. En la compuerta destaca la cabeza de azud y seis cabezas de leones tallados en granito. El manantial surge en una alberca construida en la base de los farallones calizos, tapizados por hiedras. Junto al azud tendremos un nogal y alrededor numerosos avellanos.

Continuaremos la ruta, retrocediendo hasta el Puente de Covatillas.

Puente de Covatillas. Cañón del Río Pirón. Segovia

Por el que cruzamos al otro margen del río. Nada mas terminar el muro del puente, a nuestra derecha, sale una pequeña senda, la cual cogeremos.
Dejando a nuestra izquierda las ruinas del Caserío de Covatillas. Avanzaremos río arriba. En unos 350m alcanzaremos un camino carretero, por el cual continuaremos introduciéndonos en el cañón del río Pirón.

Cañón del Río Pirón. Segovia

Cañón del Río Pirón. Segovia

Abandonaremos el camino, hacia nuestra izquierda, por una pequeña senda, siguiendo las indicaciones del cartel informativo hacia La Cueva de La Vaquera. Subiremos un pequeño repecho y traspasaremos por la portilla, una valla de alambrada.

En unos 50m, volvemos a pasar por otra portilla, junto al farallón de roca caliza. A cuya vera continúa el sendero, bordeando un campo de cereal a nuestra derecha. En unos 140m abandonamos el cañón del Pirón y siguiendo las indicaciones hacia La Cueva de la Vaquera, comenzamos a penetrar en el Cañón del río Viejo.

Cañón del río viejo. Segovia

El ancho cañón, nos sorprenderá por la policromía de sus farallones. En cómodo caminar, sin apenas desnivel iremos avanzando hasta encontrar a nuestra derecha el Río Viejo.

Cañón del río viejo. Segovia

La cueva. Cañón del río viejo. Segovia

En el otro margen del río, en un espolón, que nos hace girar hacia nuestra derecha, encontraremos La Cueva. Nosotros seguiremos avanzando por el mismo margen, adentrándonos en el cañón. El cual se va estrechando progresivamente.

Río Viejo. Segovia

Los farallones de roca caliza, presentan multitud de perforaciones cartiscas, en las que la acción del agua ha ido dejando su huella.

En el farallón de nuestra izquierda, en su parte superior, nos será visible La Torca (La cual visitaremos mas tarde, al regresar)

La Torca. Cañón del Río Viejo Segovia

Corrales de Máximo, cañón del río Viejo. Segovia

Seguimos avanzando hasta llegar a las inmediaciones del Corral de Máximo (Indicado con una tablilla con leyenda, al inicio del mismo). Aquí comenzaremos el único repecho de ascenso de la ruta, subiendo por la ladera, en paralelo al sillar de su tapia de piedras, hasta alcanzar, casi en la parte superior la entrada a la Casa de Máximo (Que haya, por los años 1950, habito su casa excavada en la roca). 

Corral de Máximo. Cañón del Río Viejo. Segovia

Corral de Máximo. Cañón del Río Viejo. Segovia

Casa de Máximo. Cañón del río Viejo. Segovia

Casa de Máximo. Cañón del río Viejo. Segovia

La casa es una visita curiosa, pues tiene varias habitaciones, un salón y dos chimeneas (Una de las cuales hacia las veces de cocina). En su interior se observa la agradable temperatura que trasmiten las cuevas. Todo ello rodeado de sus corrales y terrazas en las que cuidaba  su ganado y cultivaba, destacando los numerosos almendros.

Cañón del  Río Viejo. Segovia

Cañón del  Río Viejo. Segovia

Tras la visita a la casa, continuamos ascendiendo hasta la cima del farallón, junto a las ruinas de los corrales. Allí unas buenas vistas gratificantes del Cañón del Río Viejo, desde la meseta.

Comenzamos el retorno a Peñarrubias, iremos retrocediendo por la parte alta del farallón, hasta encontrarnos un nuevo barranco. El cual descenderemos diriguiéndonos hacia nuestra derecha, hasta encontrar un desnivel menor en la ladera y pasar por el al otro lado, en el que nos será muy visible la senda de descenso. La cual tomaremos.

Por esta bonita senda, iremos en dirección al río Viejo, pero antes de llegar a él, abandonaremos la senda por nuestra derecha, volviendo a subir a la parte alta del farallón.

Para por ella, ir disfrutando de las singulares vistas y alcanzar La Torca, formada por el desplome del techo de una gran bóveda subterránea.

Cañón del  Río Viejo. Segovia

La Torca. Cañón del  Río Viejo. Segovia

La Torca. Cañón del  Río Viejo. Segovia

Una vez hayamos disfrutado de la visita a La Torca (Con precaución, pues la caída tiene metros), comenzaremos ha descender por la ladera hasta el margen del Río Viejo.

Río Viejo. Segovia

Alcanzado de nuevo el sendero junto al río, volveremos desandando nuestro pasos hasta Peñarrubias, punto de inicio y final de nuestra ruta.

Nuestras Anécdotas:

Realizamos la ruta el lunes día 15 de diciembre de 2008. Como en años anteriores, elegimos un sitio en el que poder hacer (tras la ruta) la comida de diciembre. En esta ocasión Marta fue la encargada de la organización. Ella conocía la ruta y la casa rural de su amiga "Virginia" (Que ya nos había acompañado en la ruta de diciembre de 2007). Participamos: Lucas, Ángel, Ángel Castro, Antonio, Javi, Carlos Prieto, Rosalia, Auxi, Rosa, Virginia y Carlos.

Quedamos a las 8:30 en Peñarrubias de Pirón. El hecho es que como el día había amanecido con fuerte nevada, la mayor aventura del día iba a ser ¿Si éramos capaces de llegar hasta allí?. Desde Villalba nevaba copiosamente. Los únicos que llegaron en hora (Abriendo rodada en la carretera nevada) fueron Lucas, Ángel y Carlos (8:20h). La casa estaba cerrada, pero a los pocos minutos llego Virginia (Propietaria de la casa), ¡Dudaba de que apareciéramos! (Aunque sabiéndonos montañeros, nos creía capaces de llegar, pese a la nieve). Ángel Castro y Antonio llegaron 40 minutos después. Rosa, se había confundido y estaba en La Adrada (Nos llamo por teléfono para ver como venia. Gracias a Virginia que le dio las explicaciones y por un camino en buen estado y pese a la intensa nevada, consiguió llegar 9:45h). Javi, Carlos Prieto, Auxi y Rosalia, llamaron comunicándonos una avería mecánica en el coche, que tras solucionar, llegaron con un intenso perfume a Gas-Oil a las 9:50h. Menos mal, que la casa era muy acogedora y tomando un buen desayuno, la espera se hizo más llevadera. La última en comunicar incidencia fue Marta (Estaba de viaje y solo llegaría a la comida) ¡Gran desilusión! Pues ella era la organizadora e iba a ser la guía de la ruta. Menos mal que Virginia se ofreció a realizar la ruta con nosotros (Pues no la llevábamos preparada), comenzando la ruta a las 10:10h.

Desconocíamos por completo la zona y el paisaje nos sorprendió gratamente a todos. No son las Hoces del Duratón, pero guardan mucha similitud. Además el paisaje nevado, le configuraba un encanto especial, para esta jornada de ruta y comida de diciembre.

La nieve, fue la protagonista de la jornada, pues como colegiales, ¡Olvidando nuestros muchos años! guerreamos a bolazos de nieve en varias ocasiones. El suave desnivel y la anchura del camino, permitieron la animada charla y las bromas durante toda la ruta.

Como colofón a la jornada, una vez finalizada la ruta, volvimos a la casa rural (14:10h). Donde ya nos esperaba nuestra amiga y ¿Organizadora? Marta. Sus excusas fueron aceptadas (¡Que no sirva de precedente!) porque la ruta nos había gustado mucho y porque su ausencia, había sido cubierta con buena nota por nuestra amiga y guía Virginia.

Ya relajados, con hambre y en la encantadora Casa Rural "Del Verde al Amarillo", disfrutamos de la tradicional comida de diciembre. Comida buena y abundante, en un entorno muy agradable, con conversación amena, que prolongo la sobremesa hasta las 16:45h. Virginia completo su jornada de guía, mostrándonos el pueblo, el horno comunal y la fragua.

Tras el paseo por las silenciosas calles de la localidad, a las 17:30h dimos por finalizada tan entrañable jornada. Despidiéndonos hasta la próxima ruta y retornando (Ya con poca nieve) hacia nuestros lugares de residencia.

Comida de Diciembre en la Casa Rural Del Verde al Amarillo. Peñarrubias de Pirón. Segovia